LAS GRANDES DEPREDADORAS
su primer objetivo es ganar dinero
Las grandes cadenas alimentarias son empresas que interactúan con lo alimentos para conseguir grandes beneficios, dando un servicio centralizado con variadas opciones. Como empresas su objetivo es la obtención de beneficios. Muy lícito así planteado, pero, .....
¿Quien asume los gastos de contaminación medioambientales?
¿Quien es responsable de la calidad de los productos ofrecidos?
¿Quien garantiza la transparencia de la trazabilidad?
¿Quien promueve los monocultivos, contamina el medioambiente y arruina a miles de agricultoras/es?
¿Quien se esconde detrás de las grandes deforestaciones?
¿Y si hablamos de fraudes alimentarios?
¿ ...................................................................
Para conocer más en profundidad lo que puede esconderse trás las grandes cadenas alimentarias recomendamos encarecidamente la lectura del libro "¡Como puedes comer eso!", de Christophe Brusset. El autor sabe muy bien de lo que habla porque durante años fué directivo de importantes grupos de alimentación.
Así comienza el libro:
"Carne de caballo vendida como carne de buey, té verde chino rico en pesticidas, azafrán español que en realidad es iraní, mermelada de fresa sin fresas, guindilla india aderezada con excrementos de ratón, leche infantil al toque de melamina... Bienvenidos al lado oscuro de la industria alimentaria, en el que las regulaciones se estiran hasta el límite para ampliar el margen de beneficio, incluso a cambio de poner en riesgo la salud de los consumidores.
Desde las bambalinas de una industria cada vez más global, Christophe Brusset, directivo de grandes grupos de alimentación durante más de dos décadas —en las que fue cómplice y testigo de muchas de estas prácticas—, rompe con este libro la ley del silencio que impera en un sector en el que el fraude, a menudo, es la norma, y convierte al lector en espectador privilegiado de la que parece ser una competición planetaria para suministrar materias primas cada vez más baratas, en medio de la más absoluta impunidad.
«Seamos francos y directos: lo único que les interesa de ti a los industriales, al igual que a las cadenas de grandes superficies, es tu dinero, no tu felicidad ni tu salud. Recuérdalo siempre. Así que no confíes en nadie, mantente atento y, sobre todo, ¡sé exigente! Eres tú quien, frente a los estantes de las tiendas, decide comprar o no lo que le presentan. Utiliza ese poder para lograr cambiar las cosas".
La publicidad engañosa
Cualquiera que sea el medio de comunicación que abramos conoceremos, a través de la publicidad, quienes son los patrocinadores: alimentación, bebidas, medicamentos, belleza, ,.... muy pocos sectores industriales, pero muy fuertes. Esto es normal, pero, ....
Extraemos literalmente de la web de la OCU (https://www.ocu.org/)
"La publicidad se encuentra siempre presente en nuestra vida cotidiana, de hecho casi todas las normas protectoras del consumidor hacen mención a esta materia. La publicidad se encuentra regulada por la Ley General de Publicidad y la de Competencia Desleal, así como aquellas normas especiales que regulan determinadas actividades publicitarias.
Cuando un establecimiento o empresa nos hace una oferta, la misma constituye un elemento contractual que podemos hacer valer en cado de que luego ese empresario no lo quiera respetar. La ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuario señala que:
- La oferta, promoción y publicidad de los bienes o servicios se ajustarán a su naturaleza, características, utilidad o finalidad y a las condiciones jurídicas o económicas de la contratación."
y más adelante:
"Se considera un acto de competencia desleal aquel comportamiento contrario a la buena fe, que puede distorsionar de manera significativa el comportamiento económico del consumidor y haga que tome una decisión que en otro caso no habría tomado (comprar un producto que no necesita, contratar un servicio que no reúne las condiciones que le han ofrecido, etc.)
Dentro de los actos de competencia desleal está incluida la publicidad engañosa que es aquella que o bien contiene información falsa, o que sin ser falsa, de cualquier manera induce o puede inducir a error en sus destinatarios, como por ejemplo:"
y aquí es a donde quería llegar yo, porque las imágenes no se corrresponden con la realidad que nos imaginamos, y a la que asociamos nuestros alimentos. En los anuncios se presentan vacas pastando en libertad, granjas idílicas. cocineros mimando el producto, pescadores en mar abierto,... cuando en realidad la producción se realiza en condiciones diametralente opuestas, en industrias cárnicas, con miles de animales hacinados y medicados, en grandes extensiones de monocultivos tratados con numerosas sustancias químicas, piscifactorías, explotación de mano de obra infantil, .....
Impactos de las grandes cadenas alimentarias
Si le preguntamos a la gente sobre las causas del cambio climático, la mayoría contestaría que la quema de combustibles fósiles,, o la combustión de los automóviles, camiones y aviones, con las emisiones industriales. Esto es así, por supuesto, pero sólo en parte. Aunque cueste creerlo, lo cierto es que la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero (DEI) a nivel global es el sistema agroalimentario industrial.
Los fertilizantes químicos, la maquinaria pesada y otras tecnologías agrícolas dependiente del petróleo contribuyen significativamente a estas emisiones. El impacto de la industria alimentaria destruye bosques y sábanas para producir forrajes con los que alimentar a los animales, y origina desastres que dañan el clima por el exceso de embalajes, el procesado, la refrigeración y el transporte de los alimentos a grandes distancias; a pesar de esto, millones de personas siguen pasando hambre.
Vamos a analizar en detalle cuál es el porcentaje de GEI que aporta cada una de estas etapas y procesos.
Produción agrícola
La mayoría de los estudios establecen que la contribución de las emisiones agrícolas (las que se producen en los campos de cultivo) oscilan entre el 11 y el 15% de las emisiones globales. Sin embargo, no es frecuente que se informe de que la mayor parte de estas emisiones son originadas por las prácticas de cultivo industrial que se basa en el uso de fertilizantes químicos (con nitrógeno), de maquinaria pesada que funciona con gasolina o gasoil, y en operaciones industriales de cría de ganado altamente concentradas, que también a la atmósfera toneladas de gas metano
Como siempre que se intenta imponer un modelo se habla de las ventajas reales o ficticias, si es que las tiene, pero siempre se olvidan de hablarnos de los perjuicios: gasto energético excesivo e innecesario, contaminación atmosférica y de los acuíferos, efectos sobre la biodiversidad y la salud de las personas, monopolización de los recursos, etc...
Es común reconocer que los procesos agrícolas en sí mismos contribuyen con este porcentaje. Sin embargo, debemos destacar que la mayoría de estas emisiones resultan de uso de insumos industriales (fertilizantes y plaguicidas químicos); de la gasolina para los tractores y la maquinaria de irrigación; y el exceso de excrementos generado por la cría intensiva de animales.
Deforestación y cambio de uso del suelo.
Tampoco es frecuente que las cifras de contribución de la agricultura tengan en cuenta los cambios de uso del suelo y la deforestación, que son responsables de una quinta parte de las emisiones de GEI.
A nivel mundial, la agricultura industrial y la de las praderas, las zonas húmedas, las fincas y los bosques, y destruye al arar, enormes superficies de suelo. La expansión de la frontera agrícola es el principal contribuyente a la deforestación, y supone entre un 70 y 90% de la desforestación global.
Esto significa que un 15 a 18% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero resultan de cambio de uso del suelo y de la deforestación ocasionada por la agricultura. Pero aquí, una vez más, el sistema alimentario global y su modelo de agricultura industrial son los principales culpables. El máximo promotor de la deforestación y de la expansión de las plantaciones industriales para producir mercancías como la soja, la caña de azúcar, la palma aceitera,, el maíz industrial y colza, así como las plantaciones forestales de producir celulosa.
Desde 1990, el área plantada con las cinco mercancías citadas en primer lugar se incrementó en un 38%, a pesar de que la superficie plantada con alimentos básicos (ccomo el arroz o el trigo) decreció.
La FAO afirmar que la expansión de la frontera agrícola es la responsable del 70 al 90% de la deforestación mundial.. De ese porcentaje, más de la mitad se origina para obtener un puñado de mercancías agrícolas destinadas a la exportación.
La agricultura industrial es responsable del 15 a 18% de las emisiones de GEI por la desforestación que promueve..
Hasta ahora hemos visto cómo las emisiones procedentes de la agricultura industrial en los campos y la desforestación asociada a la misma. Igual de importante es lo que ocurre entre el momento en que los alimentos abandonan las fincas hasta que llegan a nuestra mesa.
Transporte de alimentos.
La industria de la alimentación es en la actualidad el sector económico más grande del mundo. En el momento actual, los alimentos se preparan y distribuyen realizando enormes gastos para su procesamiento, empacado y transporte, fases todas ellas que generan emisiones de GEI. Encontrar datos precisos sobre tales emisiones resulta muy difícil.
Los estudios realizados en la Unión Europea concluyen que cerca de una cuarta parte del transporte total corresponde al transporte comercial de alimentos. Los ingredientes empleados en los piensos animales se pueden cultivar en Argentina para alimentar pollos o cerdos en China, o la Unión Europea..
Mucha de nuestra comida, producía en condiciones industriales en lugares lejanos, viaja miles de kilómetros antes de llegar a nuestro plato. Las cifras dispersas sobre transporte, disponibles en otros países,, tales como Kenia o Zimbabue, indican que el porcentaje aumenta en los países "no industrializados", donde la "producción de alimentos y su entrega originan entre 60 y el 80% de la energía total utilizada,, incluida la humana, animal y los combustibles".
Si el transporte le corresponde un 25% de las emisiones globales de GEI, los datos de la UE permiten calcular que el transporte de alimentos suponen por lo -1 6% de las emisiones globales de GEI.
Procesamiento y embalaje de los alimentos.
Los datos disponibles provienen principalmente de la Unión Europea, donde los estudios muestran que el procesamiento y embalaje de los alimentos suponen del 10-11% de las emisiones de GEI, mientras que la refrigeración de la comida es responsable de un 3-4% del total de las emisiones, y la venta de alimentos a pequeña escala otro 2%. Siendo prudentes con las cifras de la UE, y extrapolandolas con las pocas cifras que existen de otros países, podemos calcular que entre un 8-10% se debe al procesamiento de los alimentos.
El procesamiento es un aspecto muy rentable de la cadena alimentaria industrial. La transformación de los alimentos en platos listos para consumir, bocadillos, aperitivos, bebidas, etc.,, no necesita un enorme gasto de energía sobre todo en forma de carbono. Lo mismo ocurre con el empaquetado y/o el enlatado de estos alimentos..
Refrigeración y venta al por menor.
La refrigeración está en la base de los modernos sistemas globales de distribución de alimentos en supermercados y cadenas de comida basura. Allí a donde llega el sistema alimentario industrial, también llegará la "cadena de frío". Si el enfriamiento es responsable del 15% del total del consumo de energía a nivel mundial, y dado que las fugas de refrigerantes químicos son una importante fuente de GEI,, podemos concluir que cerca del 1-2% se debe a la refrigeración,, y 1-2% a la venta al por menor. Por otro lado, el transporte, el procesamiento, eel embalaje y la refrigeración juntos supone entre un 15-20% de las emisiones de gases de efecto invernadero..
Desperdicios.
El sistema alimentario no consume todo lo que produce. El sistema agroalimentario industrial desperdicia cerca de la mitad de toda la comida que produce, en el largo viaje entre los establecimientos agrícolas y los comerciales, los procesadores de alimentos, las tiendas y los supermercados. Esta cantidad sería suficiente para alimentar seis veces a todas las personas que pasan hambre en el mundo. Gran parte de estos desperdicios se pudren en vertederos y rellenos sanitarios, originando cantidades importantes de GEI. Diferentes estudios indican que entre un 3,5-4,5% de las emisiones globales de GEI procedente de los desperdicios, y más del 90% dee ellos provienen de la materia originada en la agricultura y en el procesamiento. Esto significa que la descomposición de los desperdicios orgánicos originados en los alimentos y la agricultura ess responsable del 3-4% de las emisiones globales de GEI.
De acuerdo con lo que acabamos de ver, está demostrado que la producción industrial de alimentos desde que se cultivan hasta que termine nuestra mesa provoca más de la mitad de las emisiones de gases de efecto invernadero que está modificando el clima.
Bibliografía recomendada
GRAIN es una pequeña organización internacional que trabaja apoyando a campesinos y a movimientos sociales en sus luchas por lograr sistemas alimentarios basados en la biodiversidad y controlados comunitariamente. https://grain.org/es